Salta, Jujuy y Tucumán son las provincias Argentinas que actualmente atraviesan una situación crítica con alertas por riesgo extremo y evacuaciones preventivas.
La escena se repitió en distintos puntos del norte argentino con escasos días de diferencias y se encontraron situaciones alarmantes.
Como lo son columnas de humo a la distancia, vecinos con baldes intentando frenar el fuego y cuadrillas de bomberos exhaustas peleando contra las llamas.
Salta es de las zonas en la que el fuego está golpeando con más fuerza y según informó el Ministerio de Seguridad y Justicia, durante el fin de semana se activaron múltiples operativos por focos registrados en áreas urbanas y rurales.
En los focos de incendio participaron Bomberos Voluntarios, efectivos de la Policía de Salta y personal de Defensa Civil. Por el accionar de los efectivos, los focos fueron controlados, pero las autoridades salteñas confirmaron que continúan las tareas de enfriamiento en varias zonas, ante el riesgo del reinicio del fuego.
Uno de los episodios más graves se produjo en el barrio Ampliación 20 de Junio, donde el fuego arrasó con al menos 36 viviendas y como si fuera poco, denunciaron a una empresa por iniciar el incendio en un basural clandestino, donde la empresa habría arrojado residuos sin autorización.
Así se encuentra Jujuy
Mientras tanto, en la provincia de Jujuy, la situación no fue distinta, ya que el viernes primero de agosto, la provincia enfrentó una jornada difícil con múltiples focos de incendio en sectores.
La localidad de Palpalá, una vivienda ubicada en el barrio 30 Hectáreas resultó afectada, también se reportaron daños en zonas urbanas de Alto Comedero y otras áreas residenciales. La combinación de vientos fuertes, temperaturas elevadas y vegetación seca agravó el panorama durante las últimas horas.
Qué comentaron las autoridades sobre el estado de Tucumán
En la zona de Tafí del Valle, provincia de Tucumán, se detectaron tres focos en la zona alta del Cerro Muñoz, donde brigadistas y bomberos voluntarios trabajaron con marcadas dificultades en un área a más de 2.700 metros de altura.
A partir de esto y según informó el director de Defensa Civil, Fernando Torres, los focos detectados en la última semana habrían sido provocados intencionalmente por personas.
La situación ya afectó a más de 140 hectáreas y se agravó por la presencia del viento zonda durante el cierre de la semana pasada. Lo que obligó a suspender por momentos los vuelos de los helicópteros con helibaldes para apagar el fuego de manera más efectiva