
El último informe oficial de abril muestra un crecimiento del 26,9% contra un 2024 con números en rojo. Aun así, el sector sigue afectado por el recorte de fondos y la paralización casi total de las obras nacionales.
El ámbito de la construcción atraviesa momentos difíciles en todo el país, especialmente por la paralización casi total de la obra pública nacional. El recorte de fondos dispuesto por la gestión de Javier Milei impactó de lleno en la actividad, que busca cómo sostenerse en un escenario privado también complejo y apuntalado, en algunos casos como Corrientes, casi de manera exclusiva por la inversión provincial.
En pleno proceso de reacomodamiento en este contexto, Corrientes fue una de las provincias en las que más se recuperó la actividad, de acuerdo con el informe oficial de abril elaborado por el Instituto de Estadística y Registro de la Industria de la Construcción (Ieric).
A nivel general, el empleo registrado en la industria de la construcción alcanzó un total de 353.051 puestos de trabajo, nivel que representa un incremento del 1,4 % mensual y la creación de casi 5.000 puestos en el mes.
El indicador de empleo promedio se ubicó en 13,4 puestos de trabajo registrados por empresa constructora, con un alza del 1 % mensual y una caída del 1,7 % interanual, menos profunda que la baja del empleo total.
La dinámica mensual a lo largo del país resultó mayormente expansiva, con 21 jurisdicciones que registraron incrementos en el nivel de empleo, destacándose San Luis y Formosa con subas mensuales del 11,2 % en ambos casos. Por el contrario, Santa Cruz exhibió la mayor contracción, con una caída del 16,5 % mensual.
A nivel regional se destaca el NEA, que lideró la suba con un 6,8 % mensual, muy por encima del promedio nacional del 1,4 %. La comparativa interanual muestra un desempeño altamente dispar entre las provincias del país.
San Luis lidera la suba del empleo con un 39,6 %, seguida por Corrientes (26,9 %) y Chaco (18,5 %). En contraste, Santa Cruz exhibe la mayor contracción (-55,1 %), acompañada por La Rioja (-27,0 %) y La Pampa (-16,0 %).
Para que los números no resulten engañosos, hay que tener en cuenta que la comparación toma como referencia un 2024 con números negativos para la actividad, y desde el sector de la construcción aclaran que las dificultades siguen presentes y están todavía muy lejos de sortearse para las empresas y también para los trabajadores del rubro.
Más allá de que las estadísticas de los últimos meses mostraron cierto repunte en el despacho de cemento y otros insumos, desde la construcción señalan que esto se debe a una maniobra comercial de emergencia que busca mantener cierto movimiento.
Hace pocas semanas, desde la Cámara Argentina de la Construcción señalaron que, ante las bajas ventas, los corralones deciden achicar su margen de rentabilidad con tal de vender, liquidando una parte importante de su stock.
"La situación de las empresas que se dedican a la obra pública es muy, muy compleja", indicaron.
En Corrientes, particularmente, la actividad sostiene cierto nivel gracias a la inversión provincial, donde el ritmo se sostuvo e incluso se incrementó. Más allá de esto, desde el área de la construcción advierten que "la inversión nacional resulta fundamental" para el sostenimiento de los puestos de trabajo.
La autovía de la ruta 12 es solo el ejemplo más visible de un cúmulo de intervenciones necesarias que terminaron paralizadas.
Con respecto al futuro, las empresas no mantienen muy altas las expectativas respecto de la inversión nacional, pero si de la provincial y esperan un repunte del ámbito privado.
Los datos de Corrientes del mes pasado son una buena noticia, pero el sentimiento todavía es de preocupación y cautela.